Los exiliados que no soporto son los que atacan a la disidencia en Cuba.

Bastante es que lo haga el régimen, como para que encima lo hagan ellos.

Dijo "un" comentarista : " perdona por la directa,pero me caen mal las intrigas, te siento en contradicciones recurrentes. Aqui dejas caer sobre Paya y el otro dia tirabas en otro blog al propietario porque no creia en las payasadas de yoani sanchez, es decir, lo que te parece bien comentar , lo ves mal en el vecindario...poco consecuente no?"

Bien, comentarista , no me da la gana de consentir que me tires de que le tiro a Payá, precisamente cuando doy cinco razones por las cuales se le deja libre sin ser parte del régimen. 

Te ocultas bajo el anonimato porque sabes que soy yoanista, y no quieres decirlo aquí firmando con su rúbrica de blog, quizá temiendo perder las amistades o un ataque. Pero no ataco por detrás ni troleo con nicks. Más bien escribe esa acusación a la fustica, que es bien ambia tuyo.

Ni Payá ni Yoani me dan con sus palabras motivos para no creer, quienes sí me las dan son esos disidentes del exilio que se la pasan despellejando por atrás. La gente sólo es enjuiciable por lo que dicen (escriben) y entonces el que no vea la diferencia ni capte el matiz entre criticar a quien ataca y respetar su opinión callándose, no está bien de la justicia ni de la cabeza. Gente como ellos sentó a Fidel donde está, y ahora le piden la cabeza lo mismo que se la piden a sus enemigos.


Son ellos, los atacantes, los que tienen un nombrete para Montaner, otro para Yoani, incluso otro para  Ernesto Hernández Busto, son quienes dividen la fuerza del exilio. Me pregunto porqué no están en Cuba con las turbas de acoso, será porque les gusta el capitalismo.

Curioso que diga que le caen mal las intrigas ¿no? Y se pasan la vida chismeando en blogs y buscando contradicciones en la integridad de la gente, siendo ellos la contradicción con patas.