Antes y ahora.
Antes, Dios 'había creado todas las criaturas', de ahí su nombre : El creador. La Biblia describía cómo hizo a cada animal según le plugo; así cuando se le ocurrió un cuello largo hizo a la jirafa , y en un ataque gay - Dios puede permitírselo, el tiene ambs sexos -hizo al león con su melena rubia, y así según se le ocurrió había creado lo que le dio la gana y más tarde junto con Adán le puso nombre.
Pero en el siglo XIX llegó Darwin y habló de evolucionismo. Las especies habían evolucionado para adaptarse al medio, sin mediación alguna de inteligencia divina.
Yo no sé porqué hallan menos absurdo decir que Dios creó la jirafa, o decir que ésta evolucionó para adaptarse. Sin inteligencia no puede haber para. Porque, ¡ojo! No están diciendo que el azar recombinó los genes y que las criaturas mejoradas sobrevivieron mientras que las otra no; la supervivencia del más apto es OTRO capítulo y tema aparte.
Lo que están diciendo es que un bicho quería ser jirafa, con ese cuello largo que necesita el corazón más potente en presión sanguínea bombeada que existe, y con esas manchas que ocultan un sistema cardiovascular de irradiación de calor para no asfixiarse en el calor de al sabana; dicho bicho, al que nadie conoció, no sólo pensó todo esto sino que por lo visto se mantuvo en suspensión anímica mientras el cuello se le estiraba ( no explica cómo, ¡para qué!) y su corazón aumentaba la potencia. Si la potencia aumenta primero, revienta el cerebro, porque aun el cuello no está distante, y si crece el cuello antes, se queda sin riego y se cae y se la comen los coyotes o los buitres.
Pero no teman. Los coyotes también debían estar en suspensión anímica 'pensando' cómo desarrollar estrategias para cazar, y los buitres cómo desplumarse permanentemente el cuello para no retener bacterias de la carroña nocivas allí.
Se nos pide creer que dicho bicho dispuso de aire acondicionado a la sombra de un baobab mientras las arterias creacian a toda prisa formando como celdas del radiador de un coche. El bicho ya sabía de disipación calórica. Claro, lo que digo es digno de burla. Pero ¿ lo es por repetir lo que ellos dicen o porque es má sencillo creer en la biblia? Yo ni entro ni salgo del tema, pero ellos son los que sí entran y bien y los que nos quieren llevara a rastras dentro del absurdo.
Harto estoy de oir los miles de millones de años como excusa. Ese bicho que describo, la proto-jirafa, dicen, 'no estuvo una mañana debajo de un baobab estirando su cuello a la par que engrosando el corazón y aumentando su radiación calórica', sino que eso ocurrió con el tiempo. No me dicen cuantos años vivió el bicho. Y que no lo hagan. Tampoco que me digan que cada bichito recién nacido tenía las nuevas caractaerísticas un poco más desarrolladas, porque deberán decirme antes que todos vivían a la sombra pero ya 'pensando' en adaptarse, porquela palabra pensar no cabe si se habla del azar, no cabe el porque ni el para.
Ninguna criatura sabe como llegó a su ser. Si mi jirafa pudiera hablar y entender y oir las dos teorías, creo que elegiría antes oir a un cura que un evolucionista. Es más sencillo y bastante menos absurdo.
Antes, Dios 'había creado todas las criaturas', de ahí su nombre : El creador. La Biblia describía cómo hizo a cada animal según le plugo; así cuando se le ocurrió un cuello largo hizo a la jirafa , y en un ataque gay - Dios puede permitírselo, el tiene ambs sexos -hizo al león con su melena rubia, y así según se le ocurrió había creado lo que le dio la gana y más tarde junto con Adán le puso nombre.
Pero en el siglo XIX llegó Darwin y habló de evolucionismo. Las especies habían evolucionado para adaptarse al medio, sin mediación alguna de inteligencia divina.
Yo no sé porqué hallan menos absurdo decir que Dios creó la jirafa, o decir que ésta evolucionó para adaptarse. Sin inteligencia no puede haber para. Porque, ¡ojo! No están diciendo que el azar recombinó los genes y que las criaturas mejoradas sobrevivieron mientras que las otra no; la supervivencia del más apto es OTRO capítulo y tema aparte.
Lo que están diciendo es que un bicho quería ser jirafa, con ese cuello largo que necesita el corazón más potente en presión sanguínea bombeada que existe, y con esas manchas que ocultan un sistema cardiovascular de irradiación de calor para no asfixiarse en el calor de al sabana; dicho bicho, al que nadie conoció, no sólo pensó todo esto sino que por lo visto se mantuvo en suspensión anímica mientras el cuello se le estiraba ( no explica cómo, ¡para qué!) y su corazón aumentaba la potencia. Si la potencia aumenta primero, revienta el cerebro, porque aun el cuello no está distante, y si crece el cuello antes, se queda sin riego y se cae y se la comen los coyotes o los buitres.
Pero no teman. Los coyotes también debían estar en suspensión anímica 'pensando' cómo desarrollar estrategias para cazar, y los buitres cómo desplumarse permanentemente el cuello para no retener bacterias de la carroña nocivas allí.
Se nos pide creer que dicho bicho dispuso de aire acondicionado a la sombra de un baobab mientras las arterias creacian a toda prisa formando como celdas del radiador de un coche. El bicho ya sabía de disipación calórica. Claro, lo que digo es digno de burla. Pero ¿ lo es por repetir lo que ellos dicen o porque es má sencillo creer en la biblia? Yo ni entro ni salgo del tema, pero ellos son los que sí entran y bien y los que nos quieren llevara a rastras dentro del absurdo.
Harto estoy de oir los miles de millones de años como excusa. Ese bicho que describo, la proto-jirafa, dicen, 'no estuvo una mañana debajo de un baobab estirando su cuello a la par que engrosando el corazón y aumentando su radiación calórica', sino que eso ocurrió con el tiempo. No me dicen cuantos años vivió el bicho. Y que no lo hagan. Tampoco que me digan que cada bichito recién nacido tenía las nuevas caractaerísticas un poco más desarrolladas, porque deberán decirme antes que todos vivían a la sombra pero ya 'pensando' en adaptarse, porquela palabra pensar no cabe si se habla del azar, no cabe el porque ni el para.
Ninguna criatura sabe como llegó a su ser. Si mi jirafa pudiera hablar y entender y oir las dos teorías, creo que elegiría antes oir a un cura que un evolucionista. Es más sencillo y bastante menos absurdo.
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