Es verdad que el castrismo se apoya de las sanciones a su régimen para tergiversar la verdadera lucha de los cubanos y dar a entender que el conflicto de Cuba no es entre cubanos sino, un problema bilateral con Estados Unidos. Es cierto que los países de América Latina no apoyan más a los cubanos que desean la libertad porque entienden que las sanciones de los americanos son letales, y ponerse en contra de Castro de alguna manera se vería como una postura a favor del “Imperialismo Yanqui”. También no es menos cierto que el embargo le ha dado la posibilidad a Castro de encarcelar a cuanto opositor pacifico se le ha enfrentado con la justificación de trabajar a favor de una potencia extranjera, sin embargo, ¿mejoraría en algo al Pueblo de Cuba el levantamiento unilateral del embargo sin concesiones por parte de la tiranía?. Los hechos son evidentes, yo creo que no, ¿ayudó en algo a los cubanos los chorros de dineros recibidos por Castro de manera constante por espacio de treinta años provenientes del campo socialista? ¿Ayuda en algo los miles de extranjeros de todas las latitudes que visitan anualmente la Isla?
Los datos no mienten, Cuba recibió de la Unión Soviética la increíble cifra de 5 mil millones de dólares anuales, con esa cantidad se pudo fácilmente derrumbar a la Isla completamente y fabricar una nueva. A Cuba la visitan dos millones de turistas al año, y ninguno de ellos siquiera sabe que es democracia, porque no van de profesores de política, van a practicar el turismo sexual.
Pero el objetivo de la tiranía no es en ninguna forma beneficiar al Pueblo de Cuba, ni con dinero, ni turistas sino, mantener la dictadura a como de lugar, y paradójicamente la necesidad y el hambre son factores sumamente importantes para lograr ese propósito.
El levantamiento de las sanciones por parte de Estados Unidos no traerá beneficios tangibles para el Pueblo cubano, de hecho Estados Unidos es el séptimo socio comercial de Cuba aunque parezca increíble. Unas 110 empresas americanas de 19 Estados de La Unión se dieron cita en Cuba en la próxima pasada XXI Feria Internacional de La Habana, se firmaron contratos solamente en ganado vacuno por la cantidad de 50 millones de dólares, y otros contratos por la misma cifra en pollo, frijoles y hasta en chicles Adams.
Ya Cuba había hecho hasta esa feria compras a Estados Unidos por valor de 500 millones de dólares; solamente en el 2003 se realizaron gestiones de compras a la Unión americana por valor de 343,9 millones de dólares en mas de 300 rubros; hace meses el empresario John Parks Wright (en la foto, con Guillermo García), presidente de la compañía del mismo nombre del estado de la Florida le entregó a la Tiranía mas de 50 cabezas de ganado.
En octubre del 2003 la compañía norteamericana se convirtió en la primera empresa ganadera de Florida en suministrar ganado a la isla con una operación de venta de 250 cabezas de tres variedades para la producción de carne.
Soya, trigo, pollos, frijoles, maíz y otros productos comestibles comenzaron a llegar a Cuba a partir de diciembre del 2001, gracias a una enmienda que logró eliminar este rubro del embargo a la isla impuesto hace más de cuatro décadas.
Con los convenios (los de Abril del año 2004) sumaron $ 718 millones el monto de compras cubanas a EEUU desde la apertura del intercambio.
Grandes compañías como FC Stone, Archer Daniels Midland de Illinois, la Federación Arrocera de Estados Unidos --que representa al 85 por ciento de los productores del grano--- están actualmente firmando contratos con Castro. En la Habana en el mes de Abril se firmó un nuevo contrato por la compra de $ 100 millones más.
Según el Ministro de ALIMPORT, Cuba no sólo compra al contado a Estados Unidos, sino que lo hizo en operaciones con Francia, Nueva Zelanda y Argentina. Mientras, se respetaron puntualmente los compromisos con sus otros proveedores.
Durante las conversaciones de ese año, la delegación norteamericana, compuesta por representantes de 172 compañías se comprometió a dar un impulso aun mayor a este tipo de colaboración. Cabe entonces preguntarse ¿Dónde va a parar tanto alimento, por qué todavía existe el racionamiento, y por qué la creación de un mercado paralelo exclusivista y discriminatorio que ahoga la existencia del País?
¿Qué beneficios ha traído para los cubanos estas compras? De hecho los cubanos para comprar un pollo o para comerse un bistec tienen que esperar que algún familiar en el extranjero le mande dólares, de lo contrario tienen que jinetearlo en las calles de La Habana. De manera que Raúl Castro, si quiere que le levanten las sanciones, es solamente para ganarle su última batalla al “Imperialismo” no para mejorar la vida del Pueblo cubano, sin embargo, existen dos factores muy importantes que me obligan a estar a favor de este débil y vilipendiado Embargo, y en total desacuerdo con la opinión hipócrita de la mayoría que están de acuerdo en eliminarla de alguna manera, el primero radica en no darle la victoria moral a Fidel Castro con un levantamiento unilateral de las sanciones que no mejorará en nada la oprimida vida del pueblo cubano, de hacerlo la doctrina castrista tomaría tanta fuerza en Cuba que sus seguidores, aun después de su muerte se negarían rotundamente a cambiar el sistema social, de hecho, con el levantamiento de las presiones, tendrían todas las herramientas necesarias para manejar la “dictadura del proletariado” por cincuenta años más… Por otra parte y como segundo argumento tendríamos que con el levantamiento de las sanciones vendrían las líneas de crédito y esto endeudaría tanto a Cuba con la banca americana que los cubanos jamás, aunque vendan la Isla en subasta, podrían pagar tal deuda… Los hermanos Castro le deben dineros a las once mil vírgenes, sin embargo, este dinero no lo debe a Estados Unidos sino, a gobiernos que al margen de las instituciones crediticias internacionales se arriesgaron a hacer prestamos a una dictadura de extrema Izquierda radical, cosa que no ha hecho ese país, de manera que lo único que se pierde en caso de exigencia es una mejor relación comercial, no futuros acuerdos de créditos con instituciones bancarias internacionales; ahora, si en vida de Castro se hace esa concesión, o para obtener de Raúl la liberación de algunos presos, que se olviden los cubanos de una vida mejor, porque endeudarse con EEUU no es endeudarse con Evo Morales por unos pocos sacos de arroz.
En la propuesta de ley H R 4645 se expone la necesidad de permitir a los ciudadanos americanos que visiten a Cuba y derrochen su dinero a manos llenas. Esto, como de costumbre, le dará el respiro que necesita ahora la dictadura. Porque como siempre, cada vez que las fuerzas sociales cubanas ponen a la dictadura al borde del asfixia, “viene el sordo y nos hecha a perder el concierto” porque el proyecto de ley de marras no solo contiene la eliminación de las restricciones de viajes sino, que levantaría al mismo tiempo las barreras crediticias, y si eso se aprueba tendremos castrismo en Cuba para cincuenta años más. Los que firmaron la famosa carta de los 74 pidiendo justamente “soga para sus cuellos” debían pensar un poco en ello. El mismo Fariñas que con su posición valiente ha ayudado a que la dictadura este en la crisis política que se encuentra actualmente. Yoani Sánchez que ha puesto a la dictadura en el cadalso cibernético, y muchos otros que el apuro y la falta de paciencia los han llevado a no calcular el costo del desespero. Una miradita a la historia no vendría mal, así como tampoco molestaría imaginarse el futuro de un castrismo con crédito.